Alfonso VI de Portugal, apodado el Victorioso, (24 de agosto de 16431 - 12 de septiembre de 1683) fue rey de Portugal, el segundo de la Casa de Braganza. Sexto de los 8 hijos del duque Juan II de Braganza -luego rey Juan IV de Portugal- y de Luisa Francisca de Guzmán. Por parte de madre era un 2º bisnieto del santo Francisco de Borja y Aragón; y, consiguientemente, descendiente directo del papa Alejandro VI (Rodrigo Borja o Borgia).
Alfonso no estaba destinado a reinar y, por lo tanto, no estaba preparado para ello, ya que el heredero de la corona era su hermano mayor, el príncipe Teodosio.2 Su formación, como la del resto de sus hermanos, estuvo poco cuidada. Esto se confirma cuando su hermana, Catalina, parte hacia Inglaterra a casarse con Carlos II sin apenas hablar inglés.2
Al contrario que sus hermanos, Alfonso pasó su infancia y su juventud en Lisboa en un ambiente de tensión salpicado de preocupaciones políticas, gubernamentales y militares. Con alrededor de 3 años padece una "fiebre maligna" que le afecta al lado derecho del cuerpo; este hecho repercutirá en su vida en diversos aspectos políticos, familiares e incluso sexuales. Actualmente se sospecha que fue una enfermedad que le afectó al sistema nervioso central, quizás una meningoencefalitis como propone el historiador Montalvão Machado.
Su hermano Teodosio fallece el 13 de mayo de 1653 y su hermana Juana el 17 de noviembre de ese mismo año. Alfonso se convierte entonces en el heredero al trono de Portugal siendo jurado como tal el 22 de octubre del mismo año.