Notas |
- Manuel Joaquín Álvarez de Toledo Portugal y Córdoba Monroy y Ayala, 1 conocido también como Manuel Joaquín Álvarez de Toledo Portugal y Pimentel2 (1664 - Barcelona, 1707), fue un noble y político español. Llegó a ser valido en dos ocasiones (1685-1689 y 1698-1699) durante el reinado de Carlos II. También ocupó los cargos de gentilhombre de Su Majestad, consejero de Estado, presidente del Consejo de Castilla y del Consejo de Italia.
Biografía
Hijo de Duarte Fernando Álvarez de Toledo Portugal y de Ana Mónica de Zúñiga Modica y Córdoba, de quienes heredó los títulos de VIII conde de Oropesa, VII conde de Alcaudete, conde de Belvis, VII conde de Deleitosa, V marqués de Frechilla y Villarramiel, III marqués del Villar de Grajanejos y IV marqués de Jarandilla, Grande de España y de Portugal.
Contrajo matrimonio con Isabel Pacheco Velasco, hermana que fue del III conde de Puebla de Montalbán, quien felleció en 1650. Con ella tuvo dos hijos: Vicente Pedro Álvarez de Toledo Portugal, quien fue el IX conde de Oropesa y Ana María Álvarez de Toledo Portugal, XI condesa de Oropesa.
El bando nobiliario que encabezaba se oponía a don Juan José de Austria, hijo natural del rey Felipe IV y valido del incapaz rey Carlos II. Vio frustrada por dos veces su candidatura a virrey de Aragón propuesta por el propio Consejo de Aragón. Muerto Juan José de Austria, y tras el periodo en que el Duque de Medinaceli le sustituyó, alcanzó la presidencia del Consejo de Castilla en 1684. Obtuvo la máxima confianza de la reina María Luisa de Orleans (1662-1689) en 1685 con el cargo de valido o favorito del rey Carlos II. Se propuso sanear la desastrosa hacienda con medidas que en términos modernos se denominaría un plan de estabilización (devaluación y recorte de gastos). Las banderías nobiliarias no acabaron, enfrentándosele los partidarios del cardenal Portocarrero y el duque de Arcos, que se acercaron al poder con el segundo matrimonio del rey con Mariana de Neoburgo en 1689. El conde de Oropesa renunció a sus cargos en 1691 y se le ordenó permanecer alejado de la corte en su señorío de la La Puebla de Montalbán.
De nuevo fue llamado a la corte en 1696, reocupando la presidencia del Consejo de Castilla, y en 1698 el máximo poder, nuevamente como valido. Quedando claro que el rey Carlos II, el último representante de la dinastía de los Habsburgo española no tendría sucesión directa, propuso a José Fernando de Baviera como candidato a sucederle, pero éste murió en febrero de 1699 y optó por el archiduque Carlos de Austria, quien luego fue el emperador Carlos VI del Sacro Imperio Romano Germánico, en un intento de continuar con la Casa de Habsburgo. Fue objeto del Motín de los gatos, en abril de 1699, tras el que volvió a caer en desgracia. Fue sustituido por el cardenal Portocarrero, partidario de la sucesión de los Borbones franceses. Vinculado a la corte del pretendiente austríaco, murió en 1707, durante la Guerra de Sucesión Española, en Barcelona.
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